A la hora de realizar una rehabilitación de edificios en Salamanca una de las preguntas más acuciantes de cualquier autopromotor es el coste económico que supondrá la reforma.

Para evaluar un importe aproximado es recomendable consultar con expertos en la rehabilitación de viviendas, ya que hay que tener en cuenta que la fachada es la primera barrera que separa el interior de las adversidades climatológicas. Por ello, circunstancias como el viento, la lluvia o incluso las altas temperaturas pueden llegar a desgastar los materiales originales y producir grietas y humedades.

Para afrontar dicha rehabilitación de edificios en Salamanca, lo primordial es tener en cuenta el clima concreto de la zona en la que nos referimos. Una alta probabilidad de lluvias, a lo que le sumamos también fuertes vientos en determinadas épocas del año, requiere un aislamiento eficaz. Para ello debemos limpiar primero las fachadas de posibles hierbas, musgo y líquenes que hayan crecido entre las piedras. 

También es aconsejable remover las juntas y morteros que estén en mal estado, y sustituirlos por unos nuevos que garanticen el aislamiento térmico y acústico a la vez que conserven la estética general de la vivienda. El empleo de colorantes específicos para piedra nos ayudará a preservar la imagen general de una fachada tradicional en una rehabilitación. En este momento es cuando los profesionales de Ingrinamar pueden detectar y subsanar posibles defectos como grietas y focos de humedad en la fachada. 

Estudiar la reparación de canalones y bajantes, o aprovechar el momento para pintar la fachada o revestirla si queremos darle una imagen nueva a nuestra vivienda son también dos opciones a la hora de renovar nuestro hogar. Sin olvidar que todo ello deberemos realizarlo siempre con los presupuestos más ajustados a nuestras necesidades.